"El Principito" traducido a la lengua indígena mexicana otomí
La obra original de Saint-Exupéry ha sido traducida a 180 lenguas y dialectos, y ahora podrá ser leída en hñahñu, nombre original de la lengua otomí en una primera edición de 2,000 ejemplares.
Con el título de Ra zi ts´unt´u dängandä, “El Principito” la nueva versión mostrará otra tonalidad del trabajo literario en el que un personaje fantástico pide que le dibujen un corderito para llevarlo a su hogar.
La obra original de Saint-Exupéry ha sido traducida a 180 lenguas y dialectos, y ahora podrá ser leída en hñahñu, nombre original de la lengua otomí en una primera edición de 2,000 ejemplares.
Esta traducción del “El Principito” tiene doble importancia porque muestra que es uno de los libros más universales y que más impacto han tenido porque nos muestra que puede expresar cualquier idea sin importar la lengua, idioma o dialecto.
A lo largo del relato, el lector se encuentra con una crítica mordaz al mundo de los adultos y a las cosas consideradas importantes, al tiempo que descubre el poder de la imaginación.
El traductor de la obra, Raymundo Isidro Alavez, aseguró que el “mayor reto” fue “describir los valores que transmite el autor” pues si se intenta adecuar a la lengua otomí de forma literal se pierde el sentido, de tal manera que leyó el libro varias veces para “sentir sus palabras y poderlas transmitir”.
Algunos vocablos como “asteroide”, “planeta” o “biombo” no existen en Hñähñu, por lo que según afirmó A la vez uno de los mayores esfuerzos de traducción fue encontrar nuevas palabras que permitieran identificar estos conceptos desconocidos en la lengua.
“Traté de rescatar los valores que inculca el autor como la solidaridad entre amigos, el deseo de ser feliz con cosas simples como una puesta de sol o las ganas de aprender y explicarse por qué suceden las cosas como si lo hiciera un niño”, explicó el traductor, miembro de la Facultad de Estudios Superiores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), plantel Acatlán.
En “El Principito” se narra la historia de un aviador perdido en el desierto del Sahara, quien conoce a un pequeño príncipe que le cuenta cómo es el lugar donde habita y sus experiencias en otros mundos.