Jennifer Aniston defiende su derecho a no ser madre
Jennifer Aniston reveló en una carta pública compartida en The Huffington Post, sus ideas acerca de lo que la prensa y los medios han desmerecido como el valor femenino, imponiendo estándares físicos y sociales y se pronunció en contra de la “cosificación” que sufren las mujeres. Frente a toda esta presión mediática y social de confabulaciones en la que se da a entender que una mujer nunca será feliz si no consigue marido, bebé y casa en las afueras; Jennifer Aniston ha decidido dar un golpe sobre la mesa y dejar en claro algunos puntos:
“Para que conste, no estoy embarazada. Lo que estoy es harta. Harta de este casi deporte de escrutinio y humillación física que sucede todos los días bajo la apariencia del “periodismo”, la “Primera Enmienda” (a la Constitución de Estados Unidos) y las “noticias de famosos’, indicó Aniston en su texto.
Jennifer Aniston constantemente es blanco habitual de los rumores de la prensa rosa en Estados Unidos, especialmente acerca de su situación sentimental o del supuesto embarazo que no ha sucedido.
En su carta, Aniston afirmó que todos los días su esposo Justin Theroux y ella son “acosados por docenas de fotógrafos” plantados ante su casa para conseguir “cualquier tipo de imagen”, aunque ello suponga “poner en peligro” a los peatones que puedan estar en ese lugar. Pero la actriz prefirió ampliar su enfoque a esta situación y consideró que, si ella es algún tipo de “símbolo” para la opinión pública, entonces es también un ejemplo de cómo nuestra sociedad mira a “nuestras madres, hijas, hermanas, esposas, amigas y compañeras”.
“Las mujeres estamos completas con o sin pareja, con o sin hijos. Tenemos que decidir por nosotras mismas lo que es hermoso cuando se trata de nuestros cuerpos. Esa decisión es nuestra y sólo nuestra”.
Sobre por qué las mujeres no estarán incompletas si deciden no ser madres:
“Durante el último mes se han gastado una cantidad desproporcionada de recursos en la prensa intentando descubrir si estoy o no embarazada (por millonésima vez… pero quién cuenta ya). Todo esto apunta a la perpetuación de esa noción en la que una mujer es una especie de ser incompleto, fracasado o infeliz si no está casada y con hijos. […] Lo que quiero decir es esto: “Estamos completas con o sin pareja, con o sin hijos. Tenemos que decidir por nosotras mismas lo que es la belleza respecto a nuestros cuerpos. Esa una decisión que nos atañe únicamente a nosotras. Tomemos esa decisión por nosotras mismas y por las mújeres jovenes de este mundo que nos ven como ejemplos. Tomémosla de forma consciente, alejadas del ruido de los tabloides. No necesitamos estar casadas o ser madres para sentirnos completas. Nosotras determinamos nuestro propio ‘y vivió feliz para siempre’.”
Sobre la presión social de verse obligada a convertirse en madre:
“Sí, puede que algún día me convierta en madre, y si lo hago, seré la primera en decirlo. Pero no persigo la maternidad porque me sienta incompleta de alguna manera, algo que la cultura de las noticias de celebrities quiere hacernos creer. Me niego a sentir que “valgo menos” porque mi cuerpo cambie de forma, me haya comido una hamburguesa o sea fotografiada desde un ángulo estrambótico que lleve a dos conclusiones: o “embarazada” o “gorda”. Por no mencionar lo incómodo que es cuando te felicitan amigos, compañeros de trabajo y extraños por una supuesto y ficticio embarazo (lo que me suele pasar una docena de veces al día)”.
Sobre por qué no hay que tomarse a la ligera a los tabloides:
“¿Está embarazada?, ¿Está comiendo demasiado?, ¿Se ha echado a perder?, ¿Está su matrimonio a la deriva porque las cámaras han detectado una “imperfección” física?.. Solía decirme a mí misma que los tabloides eran como unos cómics, que no me los tenía que tomar en serio, sólo eran un culebrón a seguir para distraerse, pero no me lo puedo decir más porque he sufrido de primera mano el acoso y cosificación de estos medios durante décadas y reflejan la visión deformada de cómo calculamos la valía de una mujer. […] Tenemos que decidir qué compramos, y puede que algún día los tabloides estarán forzados a ver el mundo desde una perspectiva diferente, con una visión más humanizada en la que los consumidores hayan dejado de comprar esta mierda”.
Sobre la visión de las mujeres en los medios:
“El escrutinio y cosificación que ponemos sobre las mujeres es absurdo y perturbador. La manera en la que me retratan los medios es sólo un reflejo de cómo vemos y representamos a las mujeres en general, midiéndolas continuamente contra un estándar de belleza deformada”.
Sobre la imposición de la delgadez a la que las mujeres se ven sometidas desde que son niñas:
“El mensaje de que las niñas no serán guapas a no ser que estén increíblemente delgadas, de que no merecen nuestra atención a menos que sean una supermodelo o una actriz en la portada de una revista es un mensaje que todos compramos. Este condicionante es algo que arrastran las niñas hasta su madurez. Usamos las noticias de celebrities para perpetuar este sistema que deshumaniza la visión de las mujeres, centrándose únicamente en su apariencia”.
En Mamá Natural celebramos a las mujeres libres y conscientes que pueden poner un pie o dos firmes en sus ideas, emociones y palabras, ser madre es verdad que no define a nadie, ni da la felicidad a las mujeres como una garantía. Cada una es libre de elegir lo mejor para sus vidas… ¡¡¡Bravooooo!!!