Técnicas de respiración para poder dormir (para padres e hijos)

Las técnicas de respiración pueden ser muy útiles para ayudar tanto a padres como a hijos a relajarse y conciliar el sueño. Aquí hay algunas técnicas de respiración que pueden probar:

  1. Respiración abdominal:
    • Acuéstate cómodamente en la cama.
    • Coloca una mano en el pecho y la otra en el abdomen.
    • Respira profundamente por la nariz, permitiendo que el abdomen se expanda.
    • Exhala lentamente por la boca, asegurándote de que el abdomen se contraiga.
    • Repite este proceso varias veces, centrándote en la respiración y relajando los músculos.
  2. Respiración 4-7-8:
    • Inspirar silenciosamente por la nariz durante 4 segundos.
    • Mantén la respiración durante 7 segundos.
    • Exhala lentamente por la boca durante 8 segundos.
    • Repite este ciclo varias veces.
  3. Respiración guiada:
    • Encuentra un audio o video de respiración guiada que te guste.
    • Sigue las instrucciones del guía para coordinar la respiración.
    • Estos recursos a menudo incluyen música suave y pueden ayudar a relajar tanto la mente como el cuerpo.
  4. Respiración nasal alternante (Nadi Shodhana):
    • Siéntate cómodamente con la columna recta.
    • Cierra la fosa nasal derecha con el pulgar derecho e inhala por la izquierda.
    • Luego, cierra la fosa nasal izquierda con el anular izquierdo y exhala por la derecha.
    • Continúa alternando durante varios minutos.
  5. Cuenta regresiva con la respiración:
    • Comienza a inhalar mientras cuentas mentalmente hasta 4.
    • Luego, exhala contando hasta 4.
    • Reduce gradualmente el conteo a medida que te relajas, por ejemplo, 3, 2, 1.
  6. Respiración consciente:
    • Siéntate o recuéstate cómodamente y simplemente enfócate en tu respiración.
    • Observa cómo el aire entra y sale de tu cuerpo.
    • Si tu mente se distrae, vuelve suavemente tu atención a la respiración.

Estas técnicas pueden ayudar a calmar la mente y reducir la ansiedad, lo que es beneficioso para conciliar el sueño. Es importante practicarlas regularmente para que se vuelvan más efectivas con el tiempo. Además, compartir estas técnicas con los niños puede ser una excelente manera de enseñarles habilidades para manejar el estrés desde una edad temprana.

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