10 rutinas diarias que significarán mucho para tus hijos
No toma demasiado crear alguna rutina sencilla y hasta corta, es en las pequeñas cosas de la vida que están las mas grandes y valiosas enseñanzas y aprendizajes.
10 uitunas diarias que significarán mucho para tus hijos… A las personas nos gustan los rituales, dicen y dicen bien que somos animales de costumbres porque eso nos da seguridad, certeza, la idea de saber lo que va a pasar y eso nos ayuda a mantenernos felices, las buenas rutinas…
Y también está el gran tema de la culpa maternal y el de pasar tiempo que se considere “de calidad” con los hijos. Es común que madres y padres busquemos tener estos grandes momentos de familia que construyen memorias y experiencias y a veces en esa ilusión perdemos de vista que las memorias familiares se construyen todos los días y las mas de las veces son esas pequeñas cosas, los momentos pequeños los que realmente importan y se graban en la memoria de los mas chicos.
En mi experiencia de mamá de 4, me he dado cuenta de que a los niños les representa mucho los pequeños detalles que se comparten en familia, por ejemplo, a mi hijo de 8 años le he preguntado: “¿Cuál fue tu mejor recuerdo de tu cumpleaños?- su respuesta muy simple: -“Cuando hicimos juntos el pastel una noche antes”, (me sorprendo y contesto: “¿No fue cuando fuimos con tus amigos al parque de diversiones?, ¿O cuándo te llevamos al concierto que querías ir?, ¿O cuándo coincidió que pudimos salir de viaje ese finde semana de tu cumpleaños en familia?”)- y su respuesta categórica fue “No, la verdad mi parte favorita fue hacer el pastel juntos”.
Los pequeños recuerdos son sus favoritos. Los que mas significan.
Con mi hija de 6 años mismo ejercicio: “¿Cuál fue tu parte favorita de las vacaciones?”… pensativa responde rápidamente “Cuando te metiste a la tina conmigo y le pusiste burbujas”…, (de nuevo me sorprendo y pregunto: ¿No te gustó mas ir a dar la vuelta en el velero?, ¿No te gustó mas tirarte del tobogán”, ¿No te gustó mas pintar tu playera?”)- y su repuesta fue “No, mi parte favorita fue la tina”.
La maternidad y paternidad son viajes infinitos y es posible perder el rumbo, no hay que dejar de poner atención en las pequeñas cosas. Por eso les comparto 10 pequeñas experiencias o rituales que procuro compartir con mis hijos de manera cotidiana, momentos que pueden recordar y momentos que personalmente atesoro:
1. Salir a caminar después de comer: tengo 4 hijos, tomo un turno con cada uno de ellos de lunes a jueves, es nuestro tiempo especial para hablar de lo que nos importa o nos inquieta, y puede ser de una hora o de 15 minutos pero no es negociable. Es un momento que espera cada uno de ellos y hasta Pablo que tiene un año y sale conmigo en su carriola y disfruta mucho porque al final ese tiempo en silencio es todo nuestro. No hay interrupciones de otros hermanos, yo no tengo que dividir mi atención, me entero de lo que cada uno desea, de sus pensamientos, y en el trayecto les digo las cosas mas y menos favoritas de estos días. A veces domina el silencio y es delicioso porque realmente nos conectamos al ir de la mano caminando y disfrutando de la compañía mutua.
2. Hornear o preparar algo de comer: sea limpiar frijoles, hacer un pastel o preparar una ensalada, la cocina es un gran centro de reunión, los niños adoran sentirse parte del día a día, y desde cortar limones hasta decorar una ensalada y es muuucho trabajo dejarlos participar (tiran, ensucia, rompen, usan de mas o de menos…), pero aprenden, gozan y convivimos en algo que todos vamos a disfrutar como un jugo, una ensalada o la cena completa. Y me da oportunidad de observar cómo crecen y van haciendo las cosas cada día mejor.
3. Asignarles tareas y reconocer su importancia. Antonio de 8 antes de dormir elige su ropa para el día siguiente de escuela. María de 6 se asegura diario que su gato tiene comida y agua fresca y que el arenero esté limpio. Iker de 3, recoge diario su ropa y la de Pablo al bote de la ropa sucia… cada acción suma a la casa, cada acción es importante en la cadena de resultados, cada acción hecha nos permite a los 5 tener tiempo para leer algo antes de dormir.
4. El baño. Son 4. Es cansado, pero le dedicamos tiempo, el baño es todo menos apurado. Tengo ayuda en casa, pero el baño es mi momento con ellos, si no hay prisas el ambiente puede ser hasta meditativo. Les va enseñando la importancia del auto cuidado.
5. Música por la mañana: recién lo acabamos de implementar, música suave de mantras, o música feliz como le llaman ellos, que los ayuda a concentrarse en un ritmo, a apreciar los sonidos de los instrumentos cuando aclaran la mente mientras se visten, a veces solo da tiempo en el auto de camino a la escuela, pero de nuevo, estamos formando una memoria que nada tiene que ver con prisa o gritos apurando la salida de casa.
6. Juegos de mesa. A mis hijos les encanta jugar Monopoly, Uno, memoria, hasta lotería… es rico, es sencillo, es tiempo familiar y los mas pequeños hacen equipo.
7. Leer en voz alta. La mayoría de los padres piensa que leer el cuento antes de dormir no siempre es posible o que es para niños muy pequeños que no saben leer. ¡¡Todos los niños lo aprecian, todos!! María y Antonio de 8 y 6 eligen un libro cada uno y una noche le toca a uno y otra noche a otro, el cuento o la lectura la escuchan los 4 casi siempre, es un momento de calma, de atención… para despedir el día y saludar la noche.
8. Tener un cariño para cada uno de ellos, cada uno tiene un sobre nombre que uso solo con él o con ella, no lo uso con ninguno de los otros 3. Eso los hace sentirse especiales y únicos como lo son. Hay ciertos ademanes corporales que usamos… cerrarnos un ojo, apretarnos una mano… algo que nos haga sentir conectados de ida y de vuelta.
9. Jugar con ellos. No siempre lo hago. De hecho, lo hago muy poco. Eso lo hace especial, los hace disfrutarlo mucho, lo mismo me sucede a mi. Me uno espontáneamente a su juego imaginativo, si para ellos acaso resulta no ser tan valioso para mi lo es.
10. cada noche, junto con el besos de las buenas noches compartimos algo favorito y algo que hayamos hecho por alguien ese mismo día, es una gran oportunidad para valorar lo que valoran y agradecer lo que son y quienes son y quienes somos como familia.
No toma demasiado crear alguna rutina sencilla y hasta corta, es en las pequeñas cosas de la vida que están las mas grandes y valiosas enseñanzas y aprendizajes. Cada día cuenta cuando criamos y amamos a un niño, no esperemos los grandes y planeados sucesos para hacer de nuestra maternidad/paternidad algo especial, vamos poniendo atención en lo que suma, en nuestra manera de hablar de sentir, en el ritmo con el que nos movemos a su alrededor. Los niños son tesoros que no pueden reponerse, son únicos, atesoremos su infancia creando los mejores recuerdos, solo tratando de hacer las cosas un poco mejor cada día.
@KarlaDoula