11 recetas fáciles para que tus hijos disfruten de comer verduras
A continuación te compartiremos algunos platillos vegetarianos para que tus hijos entren en contacto con el placer de la comida saludable:
Una buena alimentación es la que brinda los nutrientes necesarios para el bienestar integral del cuerpo, así como el gusto hedonista de estar en el aquí y en el ahora a través de las sensaciones. Se trata de un elemento física y emocionalmente vital en nuestro día a día. Por ello es indispensable transmitir a nuestros hijos estas nociones de placer y salud en relación con los alimentos en el día a día. En especial cuando se trata de las verduras…
La hora de la comida no es sólo sentarse a comer lo que está puesto en la mesa, también a disfrutar del aroma que desprende la comida, de los sabores que brindan o hasta el ruido que genera la preparación del platillo. Para incluir este ritual en el día a día del hogar, lo ideal es integrar a los niños en la cocina: permite que te ayude a la hora de preparar los platillos, que reconozca los aromas que desprenden ciertos alimentos, que pruebe algunos experimentos culinarios, entre otros.
A continuación te compartiremos algunos platillos vegetarianos para que tus hijos entren en contacto con el placer de la comida saludable:
Brócoli cocido al horno con queso
Corta y extiende el brócoli sobre una bandeja para horno untada de aceite de oliva. Sazona con sal y pimienta. Deja que se horneé de 10 a 13 minutos a 200 grados. Antes de servir, espolvoréa con queso rallado.
Col china honreada Bok Choy horneada
Precalienta el horno. Prepara una salsa para marinar con aceite de oliva y aceite de ajonjolí , salsa de soya, dientes de ajo picados y semillas de sésamo. Coloca la col en un recipiente y vierte el adobo. Hornea durante 6 o 7 minutos.
Coles de Bruselas con queso
Hierve en agua las coles de Bruselas. Mezcla mantequilla, leche, sal, queso, mayonesa y pimienta negra, luego agrégale a la mezcla las coles y viértelo todo en un molde o recipiente para horno. Hornea todo durante 30 a 45 minutos.
Champiñones fritos
Mezcla los champiñones en una sartén precalentada revolviéndolos hasta que estén dorados. Agrega aceite de oliva y ajo al gusto. Luego añade vino blanco y cuando éste se evapore, ponle una pizca de sal.
Tomates cherry fritos con ajo
Precalienta el horno. Mientras tanto, en un tazón mezcla los tomates cortados por la mitad, un poco de ajo, aceite de oliva, sal y pimienta. Pon todo en la bandeja del horno y hornéalo 20-25 minutos.
Coliflor con salsa de queso
Frie la coliflor con una salsa picante y un poco de limón. Para hacer la salsa de queso, mezcla crema agria, queso, leche, mayonesa, sal y pimienta en la licuadora. Deja la salsa en el refrigerador durante 30 minutos, y luego incorpórala al coliflor.
Arepuelas de zanahoria con salsa de aguacate y yogur
Muele zanahorias y cebollas, mézclalas con huevos, sal y pimienta. Con lo que te resultó, haz pequeños panqueques: fríelas hasta que estén doradas. Para la salsa mezcla en un bol la mitad de un aguacate, yogur, zumo de limón, y sal hasta que esté cremoso. Sirve todo junto.
Calabaza en forma de papas a la francesa
Precaliénta el horno. En un tazón pequeño mezcla queso, tomillo, orégano, albahaca, ajo, sal y pimienta al gusto. Coloca el calabacín en rodajas en una bandeja para hornear. Rocía todo con aceite de oliva y espolvoréa con la mezcla que tienes en el tazón. Hornea hasta que estén tiernos, unos 15 minutos, y luego fríelos durante 2 o 3 minutos hasta que estén crujientes.
Salsa griega Tzatziki
Ralla el pepino, mezcla yogur, ajo, acéite, vinágre, y sal en un tazón grande. Añade a la mezcla el pepino rallado e hinojo. Sirve frío, puede ser con una tortilla
Zanahorias en salsa de arce
Corta las zanahorias en rodajas. Derrite la mantequilla en una sartén y añade las zanahorias, tápala y cocina a fuego lento, revolviendo ocasionalmente durante 20 a 30 minutos. Aumenta el fuego y añade el jarabe de arce y el zumo de limón. Cocina a fuego lento durante 2 minutos. Agrega sal, pimienta y tomillo al gusto
Puré de guisantes con papas y cebollas
Hierve leche, clavo de olor y hojas de laurel en una olla pequeña y vierte luego en un tazón. En una sartén coloca la cebolla y luego llénala con agua para que cubra las cebollas. Añade mantequilla, sal y azúcar. Cocina a fuego medio durante unos 12 minutos, revolviendo ocasionalmente hasta que la cebolla esté dorada. A continuación añade harina, leche hervida, sal, pimienta, nuez moscada, guisantes (arvejas), y cebolla. Cocina todo y revuélvelo de vez en cuando hasta que el líquido se haya evaporado. Después sirve todo con algo de crema agria.