Estudio encuentra relación entre el castigo físico en la infancia y altos índices de criminalidad
La comunicación no violenta es la mejor manera de educar a los niños, hay alternativas al castigo físico, el maltrato nunca será el camino para lograr enseñar a un niño. Todos merecemos una sociedad no violenta y para ello necesitamos educar a los niños desde y en la paz.
Estudio encuentra relación entre el castigo físico en la infancia y altos índices de criminalidad. En varios países europeos los índices de crimen han disminuido drásticamente. Los criminólogos intentan explicar este fenómeno desde varias teorías, una de las más importantes, de la autoría de Christian Pfeiffer, director del Instituto de Investigación Criminológica de Lower Saxony en Hanover, afirma que hay una correlación entre los niños golpeados o castigados físicamente y el crimen.
En Alemania, por ejemplo, el siglo pasado, solía ser común disciplinar con golpes a los niños, incluso se consideraba negligente no hacerlo pero esta costumbre se ha perdido gradualmente.
Cuando el equipo de Pfeiffer entrevistó a adultos alemanes en 1992, 26{34a698e907b8d6c8957c8a51888731b5cd917852059d33ee997608a9c59bd735} respondieron que habían sido criados sin castigos físicos. En las últimas encuestas ese índice ha disminuido dos tercios. Según Pfeiffer, las personas que durante su niñez recibieron castigos físicos frecuentes, muestran en su adultez interés en tener armas. También abogan por sentencias penales extremas y pena de muerte para los convictos.
Los países escandinavos, en parte inspirados por el libro de Astrid Lindgren, Pippi Longstocking, fueron los primeros en exigir, en 1950, que fuera ilegal que los profesores golpearan a los niños. Y entre 1979 y 1983 también se ilegalizó que los padres golpearan a los niños. Desde entonces, los índices de crimen, posesión de armas y población en las cárceles, han disminuido.
Pfeiffer también observó una conexión entre religión y educación con golpes. Incluso en Alemania, hay un grupo religioso en el que es común golpear a los niños. Este grupo es una rama del Protestantismo similar a la que practican los Evangelistas blancos estadounidenses.
En Estados Unidos en 2006-07, según la Protección a los Derechos Humanos, más de 200 mil niños eran golpeados por sus profesores con un palo como forma de castigo y se trataba casi en su totalidad de niños que habitaban en los estados del sur de Estados Unidos, donde hay más familias evangelistas.
La comunicación no violenta es la mejor manera de educar a los niños, hay alternativas al castigo físico, el maltrato nunca será el camino para lograr enseñar a un niño. Todos merecemos una sociedad no violenta y para ello necesitamos educar a los niños desde y en la paz.
[The Economist]